Lo que más duele es que todas las personas a las que quieres se vayan. Y lo peor aún es que se vayan sin darte explicaciones. Que de repente desaparezcan, que dejen de hablarte, de querer saber de ti... Tiempo al tiempo,dicen, un clavo saca otro clavo,dicen,pero lo cierto es que cuando se quiere de verdad sabes que todo eso que dicen no existe.
Y es que como para no echarte de menos, si todo me recuerda a ti.
Contigo he conocido la felicidad en su máximo grado, he aprendido que también se puede llorar de felicidad, que se puede sentir muchísimo con tan solo palabras.
Pero si algo estoy aprendiendo es a echar de menos. Echar de menos el salón de tu casa, tu dormitorio, tu espalda, tu risa, tu forma de decir las cosas, lo pendiente que estabas de mi... y sobre todo los besos y como sabías calmarme... Espero que pronto la vida vuelva a unirnos porque ambo sabemos que esto no es el final.
P.
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