Y lo cierto es que me gusta ser así. Me gusta tener ese punto de niñata, de rebelde, de mala ostia. Me gusta que se me escape la rabia, que no pueda controlarme. Me gusta ser un poquito irresponsable, no estudiar, no hacer las tareas, saltarme las normas,las horas de llegada a casa...Me gusta salir con mis amigas de fiesta, bailar y ser como esa pequeña niña que intenta ser mayor. Pero tengo mis cosas buenas. Tengo mi lado sensible, esas ganas de llorar cuando pasa algo malo. Ese estar feliz, escuchar una canción lenta y ponerme triste. Tengo mi lado romántico, ese tener ganas de ti a todas horas, de necesitar tu boca más que el agua en el desierto.Tengo mi lado obediente, ese de recogerme 5 minutitos antes, ese estudiar a veces y sacar 10, ese estar de buen humor con mis padres, con mis amigos. Tengo mi lado gracioso, ese hacer miles de cagadas y que todo el mundo se ría, ese hacer la payasa por la calle y que mis amigos se averguenzen de mi aun que se esten riendo por dentro.
Tal vez no sepa controlarme, y sea bastante bipolar pero que cojones, me gusta.
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